La sonrisa asimétrica.

Hay muchos factores que nos permiten distinguir una sonrisa natural a una sonrisa forzada, o no natural. Este es uno de ellos. La sonrisa forzada, entre otras cosas, es una sonrisa asimétrica, es decir, uno de los lados de la cara no es igual al otro.

Para iluistrarlo, imaginemos que tenemos un espejo en posición vertical justo entre nuestros ojos, pues bien, cuando nuestra sonrisa es sincera y surge de forma natural, la cara debería quedar igual por un lado que por el otro, como si estuviera reflejada en ese espejo.

Hay varios ejemplos de personas que utilizan sonrisas simétricas o asimétricas: Los niños son un buen ejemplo de sonrisas sinceras, ya que cuando estos rien o sonrien siempre lo hacen con sonrisas simétricas, es muy raro, por lo tanto, ver a un niño pequeño utilizar sonrisas asimétricas. Por otro lado tenemos a los políticos, que en muchos casos utilizan sonrisas asimétricas para parecer contentos o satisfechos mientras dan un discurso o aparecen en las fotos.

Hay muchos músculos en la cara que podrían hacer que quedase asimétrica cuando sonreimos, pero ahora nos centraremos en los labios. Cuando sonreimos de manera sincera, como  hemos dicho antes, los labios deben quedar simétricos a ambos lados de la cara, mientras que cuando forzamos la sonrisa, por un lado de la cara el labio queda un poco más arriba o más abajo que del otro lado.

Aclarar que la sonrisa asimétrica no indica necesariamente algo negativo en la persona que la hace (como que está mintiendo), puede que se utilice para intentar agradar a alguien, para mostrar consideración a algo que se dice, o como una forma de cortejo, aún así, si queremos que nuestra sonrisa tenga más significado, cuando forcemos una sonrisa, esforcémonos también por hacer que esta sea igual por ambos lados.

Imagen:  Photoxpress